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domingo, 6 de julio de 2008

Historia de una voluntaria...

O cómo conocer a una de las personas más maravillosas del mundo, sabiendo que en dos días vas a tener que despedirte de ella...

Ha sido una sensación difícil de describir, me gusta y hablo con ella... sin saberlo yo también le gusto... nos separan un día y al siguiente los dos pedimos que nos junten en la expo, y así sucede... y para coronar todo le enseño la noche zaragozana

Oh gran dilema... vamos a por todas y llevamos la pasión hasta el final, o pensando en el medio-largo plazo nos contenemos y dejamos una historia de amor que no fue pero que sabemos que tenía que haber sido?

Bonita historia, final triste en ambos casos... y yo fiel a mi manera de ser no puedo sino pensar en el futuro de esa chiquilla y en que quiero seguir teniendo despierto mi corazón... ya que si me enamoro me enamoro de verdad, y soy un poco tontorrón y me enamoro fácilmente, pero me cuesta sobremanera "desenamorarme", así que creo que elegí la opción correcta.

Hoy será quizás nuestro último día juntos, aunque trataré de estar también contigo mañana, en todo caso quiero que sepas, Yolanda, que nunca te olvidaré

2 comentarios:

  1. La historia está incompleta... faltaban dos días en los que la magia surgió para envolver las horas bajo el embrujo especial de esos pocos momentos en la vida en que estás con alguien y el tiempo desaparece.

    Es MUY complicado que ocurra, y sin embargo ahí queda, para nuestro recuerdo.
    Tú te quedas con los cachirulos y el libro. Yo con las fotos, la memoria y el buen sabor de boca de lo ocurrido

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  2. Sobre todo con buen sabor de boca!!!

    Lisbo... sos un capo!

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